El coño de mi hijastra está mucho más apretado que el de su mamá.
Cuando intentaba enseñarle algo de responsabilidad a mi hijastra Chanel, ella me llevó para darle una buena paliza. Me quedé mirando su culo perfecto mientras tocaba su culo desnudo, sentía su culo desnudo, apretaba su culo desnudo y le azotaba el culo desnudo. Más tarde, los planes de Chanel fueron cancelados y se vio obligada a quedarse en casa. Le sugerí que miráramos algo de televisión, pero cuando Chanel buscaba el control remoto, ¡encontró la dura polla de su padrastro! Sin perder tiempo, se arrodilló y empezó a devorar mi polla con pura alegría en sus ojos. Estaba haciendo un buen trabajo con su lengua, lamiendo toda mi polla y también mis pelotas. ¡La chica sexy estaba adorando mi polla! Ella lo lamía todo casi con hambre, se lo llevaba a la boca y me hacía una hermosa mamada. Me corrí tan fuerte en su boca. Mi hijastra no pudo olvidar el sabor de mi esperma. Más que nada, no podía dejar de pensar en mi pene de nueve pulgadas. Ella se coló en mi habitación vistiendo lencería sexy. Me quedé asombrado cuando ella comenzó a desnudarse y mostrar sus perfectas tetas naturales. Rápidamente solté mi polla palpitante con la que estaba ansioso por arar su raja. Abrió bien las piernas y se quitó las bragas de encaje negro a un lado, exponiendo su coño rosado. Lentamente empujé la punta de mi virilidad dentro de su ya húmedo arranque. En cuestión de minutos sentí que su interior resbaladizo se tensaba y se me puso la piel de gallina cuando hice que mi encantadora hijastra se corriera con la penetración. Quería ver su hermoso culo rebotar sobre mí por detrás. Sin perder un momento, la nena sexy se inclinó y arqueó su espalda para que mi carne gruesa la usara una vez más. Al ver cómo ella hizo todo lo posible para hacerme correrme, hice lo mejor que pude para darle otro orgasmo estremecedor. Luego la nena se subió encima y comenzó a montar mi polla hasta que estuve listo para disparar mi carga caliente por toda su bonita cara y lengua.